Dolores Reyes, autora: “No estaría acá escribiendo si no fuese por las redes de mujeres”

Ojalá pudiéramos algún día decir “basta, no vamos a escribir más de las violencias a las que nos someten”, ojalá algún día pudiéramos vivir en la era del post femicidio y pudiésemos incluso elegir con total libertad otros temas menos terribles, pero desafortunadamente un poco lo que me impulsa es, bueno, la “sangría” terrible que hay en América Latina con las mujeres asesinadas.

«Estoy Harta de Vivir con Miedo»: la manta rosada que devela las violencias contra las mujeres

¿Por qué una manta rosada? Como explica Cindy, eligió esta tela y el color “como representación de la transgresión del espacio íntimo, pero también quería que fuera como de niña pequeña, para visibilizar eso, qué tan chica inician estas vulneraciones”.

Las Nombramos Bordando: una lucha textil contra el olvido y la impunidad

¿Cuántos metros llegará a tener la sumatoria de telas bordadas con los nombres de las mujeres asesinadas por su género entre el 2010 y 2020 en Morelos, México? Eso es algo que aún no saben ni logran dimensionar desde el proyecto “Las Nombramos Bordando”, levantado recientemente en dicho territorio.

La impunidad patriarcal del ecocidio y la crisis que sostendremos con nuestros cuerpos

Tanto la política de conquista como la violencia contra las mujeres que está implícita en los despojos territoriales alimenta la figura de la “conquista del oriente boliviano”, como parte de la idea masculina de dominación del cuerpo femenino, que siempre ha sido la política central de las logias terratenientes en Santa Cruz y que hoy son el centro de un capitalismo agroindustrial depredador.

El grito que México no quiere escuchar

En México prefieren desaparecerte, violarte y matarte antes que dejarte viva. Sólo en los primeros siete meses de 2017 se consignan 260 casos de mujeres desaparecidas.