No es raro que un hombre, al ser intimidado de una manera sin precedentes, irracional y violenta, vea cómo sus creencias más firmes comienzan a tambalearse
(Herman Melville)
No es raro que un hombre, al ser intimidado de una manera sin precedentes, irracional y violenta, vea cómo sus creencias más firmes comienzan a tambalearse
(Herman Melville)