Cuatro poemas de primavera

Hogueras

Hogueras con incendios en incendios.
Hogueras montañas y ramas
apiladas por un río donde fluyen los gritos
mezclados con rezos
el olor de la carne quemada
con los gritos y los rezos el incienso y los rezos confundidos.

Hogueras frías antes y después de usarse
como el sol por las noches
el volcán que duerme con nosotros
el temblor que aguanta la respiración.

Torero

Cómo miras la muerte
sin vidrios ni cortinas.
Asoma el toro su tierna esperanza
de salir con vida.

Solloza el animal y no lo escuchan
bajas su cabeza
y terminas la faena
con un rabo y dos orejas.

Sollozas antes de salir
rezándole a todos
con el alma en el manto.
Dios quiera que hoy
la muñeca sea fuerte
y el toro no tenga ganas de apuntar.

Sueño

Gusanos encaramados
unos encima de otros
mordiéndome los pies dentro
y por pequeño agujero
sacarlos con dolor.

Bosque alado

Pensar en el bosque alado
mañanas de hornos y montañas
de hornos y cenizas.
Ante ti una mesa
frutas verdosas dulces y mesas la adornan.

Pensar en el tedio del bosque alado
ríos nacientes coronas marchitas
el acantilado entre los huesos.