El jueves 28 de julio sin duda fue una jornada histórica para los feminismos negros y antirracistas del territorio. En un masivo encuentro en la Universidad de Chile, se reunían decenas de mujeres y disidencias afrodescendientes con la líder y vicepresidenta electa de Colombia, Francia Márquez.
Al son de cantos y vítores, la vicepresidenta electa entregaba sus reflexiones en torno a los principales desafíos del nuevo gobierno colombiano, de la migración, de la violencia contra las mujeres y el horizonte político de una vida distinta.
“El desafío mayor es lograr la paz para Colombia”, fueron parte de las ideas declaradas por la acreedora del Goldman Environmental Prize, conocido como el “Nobel verde, quien asumirá junto a Gustavo Petro el mandato del país latinoamericano este domingo 7 de agosto.
Compartimos tres reflexiones sobre esta visita de intercambio de ideas con la comunidad local.
Paola Palacios, Kilombo Negrocentricxs
[Texto leído en el encuentro en la U. de Chile]
Para nosotras del Kilombo Negrocentricxs, es un honor presentar a Francia Márquez; lideresa territorial, activista por los derechos humanos, abogada y vicepresidenta electa de Colombia. Francia es una mujer que actualmente representa la confluencia entre mundos que muchas veces chocan; por un lado el activismo territorial llevado a cabo por las personas campesinas, quilombolas y otras comunidades precarizadas que buscan una vida digna, y por otro, un oficialismo gubernamental que muchas veces despliega sus herramientas necro-políticas contra estas comunidades.
Esta constante tensión entre lo territorial y lo institucional no es un tema nuevo para el movimiento negro, puesto que, desde el inicio de la colonización, hasta el advenio de los Estado-nación, las personas negras hemos sido destituidas de nuestra subjetividad por los poderes hegemónicos, siendo así utilizadas y percibidas como mera mano de obra y herramienta para el supuesto desarrollo y progreso de los colonizadores.
Podemos ver esos choques y contradicciones a lo largo de la historia del movimiento negro, como por ejemplo; en la exclusión de los procesos de “ciudadanía” y participación política oficiales, en el movimiento sufragista de las mujeres blancas, y hasta el día de hoy con fenómenos como; el usufructo comercial de territorios históricamente ocupados por palenqueras, quilombolas, comunidades indígenas y campesinas, y la subsiguiente transformación de estos territorios en zonas de sacrificio, la esterilización involuntaria que se realiza de forma sistemática a cuerpas gestantes negras e indígenas, la criminalización de la migración proveniente del sur global, entre otras.
Es por esto que nos parece tan importante que mujeres como Francia Márquez lleguen a espacios que nos han sido históricamente negados, como una apuesta esperanzada de que existen nuevos horizontes y nuevas formas de hacer comunidad. Francia, y todas las mujeres negras que activan desde sus comunidades y en función de la protección del territorio como parte inalienable de nuestro buen vivir, son portadoras de saberes ancestrales que pueden ser la clave para reformar la relación entre los seres humanos y los recursos naturales, para así desafiar la vorágine brutal de nuestros territorios para el beneficio económico de las potencias mundiales, los territorios colonizadores y el bienestar financiero de las multinacionales, en detrimento de la vida de la fauna, flora y las comunidades que históricamente ocupan estos territorios desde una relación de respeto y reciprocidad con estos.
El lunes pasado conmemoramos por primera vez el 25J en conjunto con estamentos del gobierno oficial. En esa ocasión tuvimos la oportunidad de proyectar algunos materiales audiovisuales en la sala de cine del Centro Cultural Palacio La Moneda, un espacio al cual nunca habíamos sido invitadas. Desde el Kilombo, decidimos proyectar un documental sobre Francia, precisamente porque su figura nos recuerda de la importancia de poder acceder a espacios de poder, pero desde una cosmovisión que nunca abandone la rebeldía comunitaria.
Le deseamos a Francia y también a Petro todo el éxito en su periodo de gobierno, y esperamos que esta tremenda mujer y activista pueda proporcionar sus saberes, herramientas y estrategias, para así, revolucionar desde adentro la forma en la que se hace política en el territorio colombiano.
Carolina Amaral: Militante del Kilombo Negrocentricxs y estudiante de Psicología en la USACH.
¿De cuántas formas se puede incidir en la construcción y protección de los territorios que habitamos? La activista y vicepresidenta electa de Colombia, Francia Márquez, trae consigo el recordatorio de que esta pregunta posee múltiples respuestas. Francia hoy ocupa un lugar político privilegiado dentro del orden de su Estado-nación, pero mantiene una refrescante y aterrizada postura al plantear que “los espacios de poder son medios y no fines”, y que, aunque ver a una mujer negra, campesina y militante territorial ocupar esos espacios institucionales es profundamente significativo para las luchas populares, el trabajo aún está por hacerse.
Francia no se deja halagar demasiado por el fervor de las masas, y se rehúsa a volverse un monolito de la lucha por un futuro ecológicamente sensible y decolonial. En contraste, nos incita y provoca a hacernos cargo de nuestra propia revolución, y nos recuerda que todas cargamos en nosotras el porvenir de la rebeldía. Sus palabras son un bálsamo necesario para las heridas que cargamos por la violencia patriarcal y racista, y su victoria representa la incidencia de las protestas populares y el poder de la marcha de las mujeres por su territorio. En resumen, su visita nos hace saber que no existe una sola forma de hacer política, y que, tanto el cuidado de las tierras, las revueltas populares y el sabotaje a la vorágine de las multinacionales, como las posiciones dentro de órdenes gubernamentales, pueden apuntar a un mismo fin; el cuidado de la “casa grande” -la madre tierra- y la búsqueda por vivir sabroso.
Grupo de Estudios Género y Raza: Miradas Interseccionales (GRI) @grupo_estudios_gri
La visita de Francia Márquez problematiza las formas en que el/los feminismo/s en Chile se piensa/n, imagina/n y actúan. Enfatiza que las variadas formas de producción de conocimiento deben dialogar y colaborar; e interpela a la educación e investigación universitarias como herramientas comprometidas con la transformación social y la justicia en sus diversidades.
Francia Márquez nos invita con urgencia a enfocar nuestra historia desde el antirracismo y hablar de aquella violencia colonial y esclavista que ha sido negada pero que atraviesa cotidianamente nuestra sociedad, y a cada unx de nosotrxs de diferentes maneras.
Revive este encuentro, acá: https://www.youtube.com/watch?v=W3zmd23TfoY
Fotografías: Prensa U. de Chile.
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Equipo Editorial LRC