Los ricos también lloran, mamá
y nosotras
no debemos
consolarlos.
Todas las nanas se van al cielo.
La carita de Dios en la cordillera
aúlla sus nombres de nana
y ellas preparan el viaje hacia lo alto
son todas madres de Cristo
y santas atraviesan los valles
alucinando una familia
o hilvanándose el abismo al delantal.
Todas las nanas se van al cielo.
La periferia se vacía en prontitud
en tanto se inventan mudos lenguajes
de talones partidos y manos ásperas
resecando condominio tras condominio.
El acontecimiento laboral es performado
y los niños ajenos dejan de ser niños
para convertirse en animales domésticos
que observan atónitos a las no-madres ascender.
nanai, apátrida. Lleva un año en Chile.
Nunca ha trabajado en casa particular
pero desea hacer el intento.
Dice ser cariñosa, ágil y sobre todo silenciosa
atributos de reclutamiento que, sin duda, dice
servirán para la contratación inmediata
pues le gustaría comenzar puertas a dentro
con la posibilidad, en un futuro
de ser parte de la familia.
Se dejará llamar nanai
pues carga un nombre impronunciable
y aunque desconoce la palabra
asegura le recuerda
una canción de cuna.
Collage: Gaba Lamas
Lanzamiento de Nanai (2021)
de Catalina Espinoza Vera
por la Jovita Cartonera
Jueves 3 de Junio
19:00:
https://www.facebook.com/lajoyita.cartonera.10/
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