Un ponencista suelto en Bogotá (cap. I y II)

Falta un día para su viaje a Bogotá y acaba de darse cuenta de que su ponencia no aparece en el programa. El problema no deja de ser grave con ascendente catastrófico pues plantea en último término la negación radical de su ser ponencista; pone en entredicho la misma nominación ontológica del autor de ponencias ―y sin él, no sabemos qué sería de este texto.

Louis Armstrong y las dos Batallas de Santiago

Y es que García Márquez ya había dicho en noviembre del ’50, para El Heraldo de Barranquilla, que si el mundo fuera “menos trágico y almidonado”, el “problema turbulento de Oriente y Occidente” se resolvería con un partido de fútbol. El problema, claro, es que Kennedy sabía perfectamente bien que lo suyo era el béisbol y no el fútbol, el jazz y no el ballet, y para eso estaba Louis Armstrong.

Sentipensares de mujeres migrantes y racializadas a propósito del 8M en Chile: celebraciones que ameritan remiradas para caminar

El problema sobre el que queremos llamar la atención es que son justamente las formas hegemónicas de pensamiento las que nos han enseñado a no ver y a dejar fuera, a fagocitar a esa persona «otra», incluso a tragarla y anularla, cuando creemos que la estamos incluyendo con nuestro gesto.

Abram alas: as sementes vencerão o asfalto

Pois, ao passo que minorias (mulheres, negros, comunidade LGBTQI, trabalhadores do campo, etc.) são desconsideradas, ameaçadas e, no limite, eliminadas (mesmo quando ocupam lugar de grande visibilidade e com relativo poder de ação, como era a posição de Marielle), prevalece a normalização do racismo, do machismo, da homofobia, da exploração de classe, enfim, da barbárie.

Abran alas: las semillas vencerán el asfalto

Pues, al paso que las minorías (mujeres, negros, comunidad LGTB, trabajadores del campo, etc.) son despreciadas, amenazadas y, en el límite, eliminadas ―aun cuando ocupan un lugar de gran visibilidad y con relativo poder de acción, como era la posición de Marielle―, prevalece la normalización del racismo, del machismo, de la homofobia, de la explotación de clases, en fin, de la barbarie.

Pezoa Véliz recobrado

Estos textos, digamos crónicas, muestran a un Pezoa agudo en sus observaciones, de humor filoso y sano desprecio por la autoridad. Ya sea describiendo los hábitos de la calle Viana o la compleja vida social que se desarrolla en los alrededores del Marga-Marga, su prosa parece alimentarse tanto de su oficio de versificador como de ciertas inquietudes antropológicas propias de la mejor crónica chilena del siglo XX.

Morir en una playa del infierno

Ni Camus ni Rulfo tuvieron, a propósito de lo mismo, la mala fortuna de conocer fenómenos con nombres tan apocalípticos como aberrantes: la sexta extinción de las especies o el deshielo de los polos. Cuestiones que, por cierto, parecen pasar desapercibidas para todos o al menos ganarse nuestra más absoluta indiferencia.

Escribir tras bambalinas: «Arial 12» de David Bustos.

La televisión disloca la labor de la literatura. Sacrifica la relación estética que ésta tiene con el lenguaje en pos del rating y la demanda. Eso sí, Bustos sugiere que el ámbito literario tampoco está exento de estos males. La competencia y el exitismo no son patrimonio exclusivo de la TV.

Expolio patrimonial, antecedentes de una idiosincrasia

Imposible saber en qué jardines patronales se encuentran esas 120 estatuas de dioses y héroes grecorromanos o qué nexos con el mercado negro hubo para reducir semejantes piezas arqueológicas.

Una lógica simple para construir un mundo horrible: la nueva derecha que se avecina

En el caso brasileño hay mucha realidad que ha sido ignorada. El retorno de la peor versión de la derecha en Brasil es indisociable del lugar que ocupa el país en el último grupo de crisis económicas del capitalismo global.