Porque si es cierto aquello de que la revolución no será televisada, no se puede descartar que se transmita por streaming. Es en ese aparato, o ya directamente en la pantalla del computador (que es, en última instancia, una tele con teclado) donde se pueden revisar los capítulos de Chile Secreto, el programa que el escritor Jorge Baradit estrenó el año pasado en Chilevisión.