En la zona central de Chile, pequeños productores están apostando por la agricultura sintrópica como una alternativa ante problemas como la sequía. Ese es el caso de don Darío, quien a partir de un “experimento” pasó de tener un suelo completamente infértil a producir hortalizas, alojar árboles frutales, y recibir lombrices, insectos polinizadores y comunidad fúngica. Con estos resultados, sus adeptos auguran más avances en la regeneración.