“Nadie se imagina todo lo que se esconde debajo de nuestros pies en este país, o al menos en este valle. Capas y capas de gente, vida, muerte, cenizas, barro, historia”, dice Eugenia, la arqueóloga, en una especie de diario. Dice también: “Lo importante es cuidar lo que estamos encontrando. Cuidar la tierra por encima y por debajo. Cuidar lo que no se ha encontrado, pero que no por eso deja de existir”.