Vivimos en la dictadura del éxito y el éxito aquí se traduce en una hueá muy concreta: tienes o no tienes plata, la hiciste o no la hiciste.
Cuba en el corazón (y viceversa)
Los cubanos están colmados de energía, con la única y fundamental diferencia de que la despliegan libres de nuestras urgencias y, sobre todo, libres de algunas de nuestras violencias.