El veintiuno de enero de 2015, Michel Bachelet fue a visitar a Pedro Lemebel a la clínica donde se trataba el cáncer, ninguno de sus amigos estuvimos en aquella escena presidencial. Durante esas semanas, habitualmente algún amigo(a) acompañaba en la puerta, otros sentados en la sala de espera conversaban de otros tiempos, de Pedro y sus andanzas.
Presentación de “Lemebel sin Lemebel. Postales amorosas de una ciudad sin ti” de Juan Pablo Sutherland
Sutherland va más allá de los límites del homenaje, del duelo, del dolor, de los géneros literarios, situándose en un permanente estado de falta, de rechazo a una ausencia que combate con la memoria y la literatura. Su libro nos enfrenta a una geografía del deseo, desde dos vidas situadas en un país del sur global, históricamente derrotado.
El rostro electrificado del escarmiento. Fragmento del libro “En carne y hueso. Mujeres en Crónicas de Pedro Lemebel” de Gilda Luongo
Pleno centro de Santiago, septiembre del año 2014. De pronto me pregunta como afirmación: “podrías escribir sobre las mujeres en mis crónicas, Gigi, como lo que hicimos con “Cristal tu corazón”, la obra de teatro”.
Con miedo, torero: comentarios sobre la adaptación de la novela de Lemebel
Queda un sabor raro con la película, termina siendo la ocupación de fragmentos de una historia sin considerar que parte de su potencia descansa en cómo se compone en su totalidad.
A cinco años de su adiós: Pedro Lemebel está vivo en la revuelta, en la calle
Ante un nuevo aniversario de la muerte del compañero Pedro Lemebel, convocamos a diferentes escritores, escritoras y ciudadanxs a responder a la pregunta de por qué el cronista está presente en la calle, en los muros, en la palabra, en este despertar social. Esto fue lo que dijeron Colectivo Mar y Mueca, Gilda Luongo <3, Romina Reyes, Colectiva Pizarra Chueca, José Salomón y Francisca Palma.
Noche púrpura en la Divine
Sin mirar atrás las parejas gays calcinadas en los carbones de Pompeya. Encontrar los baños para refugiarse en el frío falso de los azulejos plásticos. Como si en último momento se eligiera el lugar del placer, recordando chupeteos y escenas de fragor, reviviendo en la emergencia la humedad sexual de los baños del Cinelandia.
Estigmas (o cómo transformar el agua —contaminada— en vino)
Consejo de guerra, tácticas de resistencia. Entrevista a Fabiola Albornoz de la EPC.
lo personal quedó relegado, y eso, creo, es una huella que todavía queda en muchas personas que les tocó vivir la dictadura. Eso veo como observadora al menos, que lo personal quedó relegado y que eso genera otras heridas, otros desafíos.